Por David, un Salmo: Cantaré [Tu] bondad y justicia; (a Ti, Adonái, entonaré alabanza! Prestaré atención al camino de la integridad, )cuándo vendrá a mí? Marcharé con la inocencia de mi corazón [incluso] dentro de mi casa. No pondré cosa perversa ante mis ojos; odio los actos de los que descarrían, no se adhieren a mí. El corazón perverso se apartará de mí; no sabré de maldad. Aquel que difama a su semejante en secreto, a él cercenaré; al de ojos altivos y corazón lascivo, a él yo no tolero. Mis ojos están sobre los fieles de la tierra, que puedan morar conmigo; aquel que marcha en el camino de la integridad, él estará a mi servicio. El que practica la falacia no morará dentro de mi casa; quien habla mentiras no tendrá lugar ante mis ojos. Cada mañana segaré todos los malvados de la tierra, para cercenar a todos los malhechores de la ciudad de Adonái.