Una canción, un salmo de David: Mi corazón está firme, Dios; cantaré y entonaré alabanzas incluso con mi alma. Despierta, lira y arpa; yo despertaré al amanecer. Te agradeceré entre las naciones, Adonái; entonaré alabanzas a Ti entre los pueblos. De hecho, Tu bondad alcances de allende los cielos; Tu verdad llega a los cielos. Enaltécete sobre los cielos, Dios, [muestra] Tu gloria sobre toda la tierra. Para que Tus queridos puedan ser liberados, ayuda con Tu diestra y respóndeme. Dios habló en Su santidad que yo me regocijaría, que dividiría porciones [de las tierras enemigas], mediría el Valle de Sucot. Mío es Guilad, mío es Menashé, y Efráim es la fortaleza de mi cabeza, Iehudá es mi príncipe. Moav es mi jofaina, yo lanzaré mi calzado sobre Edóm, sobre Filistea resonaré. )Quién me encaminó a la ciudad fortaleza? )Quién me condujo hasta Edóm? )No es Dios, quien [hasta ahora] nos ha abandonado, y no salió, (oh Dios!, con nuestros ejércitos? Danos ayuda contra el adversario; inútil es la asistencia del hombre. Por medio de Dios haremos valientemente, y El pisoteará a nuestros opresores.
Extraído del libro
Tehilím con Fonética y Español, de la Editorial Kehot Lubavitch
Sudamericana
© Editorial Kehot Lubavitch Sudamericana.
Prohibida su reproducción total o parcial sin autorización escrita de la Editorial.
Derechos Reservados.
© Editorial Kehot Lubavitch Sudamericana.
Prohibida su reproducción total o parcial sin autorización escrita de la Editorial.
Derechos Reservados.
© Copyright, todos los derechos reservados. If you enjoyed this article, we encourage you to distribute it further, provided that you comply with Chabad.org's copyright policy.
Sobre el libro
En este libro
Sobre la editorial
Únete a la charla