El nombre "Moisés" aparece muchas veces en cada Parshá —a menudo docenas de veces en una sola página. En cada Parshá, excepto una: la sección de Tetzavé (Éxodo 27:20-30:10) no incluye una sola mención del nombre de Moisés...
En la Parashá de esta semana leemos acerca del aceite de oliva puro que se le instruyó a Moisés que obtuviera para el encendido de la menorá en el Mishkan
Uno de los temas centrales en torno a los cuales ha girado el pensamiento judío a lo largo de la historia es el del Templo de Jerusalén, el punto donde el mundo y Di-s se reúnen en forma casi tangible.
El hombre es la única criatura vestida, es el único ser que se viste no solo para buscar calidez y protección, sino también para mejorar e incluso transformar verdadera identidad.
La porción de Tetzavé -según destacan los comentadoristas - tiene una particularidad: es la única desde el comienzo de Shemot y hasta el final de Bamidbar que no contiene el nombre de Moisés. A raíz de esto, han surgido varias interpretaciones.
Más allá del hecho de que muchos judíos están en el negocio de los “Shmates” (telas, ropa), el judaísmo tiene unas cuantas cosas para decir sobre el tema.
Notemos la paradoja: eran innovadores, pioneros, vanguardistas, creadores de nuevas formas de expresión, estaban llenos de nuevas ideas, además rompieron el molde, cambiaron el paisaje y se aventuraron hacia lo desconocido. Pero sus vidas eran lo opuesto, estaban llenas de rutinas y rituales.